Surcar las islas del Caribe francés por mar y desembarcar en sus increíbles playas es sinónimo de entrar en el paraíso por la puerta grande. De esta forma, el alquiler de barcos en el Caribe es la mejor forma de descubrir este exótico destino al otro lado del mundo.
Las playas de arena blanca, las aguas transparentes y los cocoteros son la mezcla perfecta para tus próximas vacaciones de invierno al sol. De diciembre a marzo, es la estación seca, temporada perfecta para navegar sobre un mar turquesa y bajo un sol cálido. Con una temperatura media de 30 grados, un alquiler de catamarán en el Caribe te permitirá disfrutar de las mejores islas paradisíacas y de las innumerables especialidades culinarias caribeñas.
Las islas del Caribe Francés son los departamentos de ultramar de Francia. Estas islas también son conocidas como las islas de Barlovento debido a su ubicación más oriental dentro del mar Caribe. La isla de Guadalupe y Martinica son las principales islas dentro de las Antillas Menores, conjuntamente con otras más pequeñas como Dominica, María Galante o San Bartolomé.
La manera perfecta de descubrir la costa caribeña es navegar de isla en isla a bordo de un barco de alquiler, una manera relajante y divertida de disfrutar del mar y la brisa marina en la cara. Existen diferentes zonas de navegación dependiendo de tus intereses, aquí proponemos 3 zonas de navegación para descubrir el Caribe Francés en un barco de alquiler.
Mapa de las zonas de navegación en el Caribe Francés (mapa clicable)
Índice
- Guadalupe, el paraíso en forma de mariposa
- Martinica, la isla de las flores y los mil colores
- Las Granadinas, 32 islas de aguas cristalinas
1. Guadalupe, el paraíso en forma de mariposa
Guadalupe es conocida como la isla Mariposa, debido a su característica forma que representa vista desde las alturas. En realidad, cada ala de la mariposa se trata de una isla, conocidas como Grand - Terre y Basse - Terre, que están unidas entre sí por dos puentes. Junto a otras tres pequeñas islas, María Galante con su tranquilidad, Les Saintes con sus magníficas bahías y La Desirade con su naturaleza salvaje, forman este archipiélago más al norte de la ultramar francesa.
Los mejores lugares para visitar en Guadalupe
Guadalupe es la perfecta mezcla entre bosques frondosos e infinitas playas de arena blanca. Un alquiler de barcos en Guadalupe te permitirá echar el ancla cerca de impresionantes playas, rodeado de una flora y fauna exótica excepcional. Recomendamos visitar el pequeño archipiélago de Les Saintes, situado en el suroeste de Guadalupe, una de las bahías más bellas del mundo para navegar. Podrás disfrutar de magníficos fondeaderos como la playa de Pain de Sucre, con sus aguas translúcidas, o la laguna de la playa de Pompierre. En Basse-Terre, hay playas de arena volcánica gris-negra, como la de Malendure, que está cerca del mejor punto de buceo de la zona. La bahía de Deshaies, al norte de la costa de sotavento, es un encantador fondeadero de ambiente criollo que abre la navegación al norte de las Antillas.
En Grande-Terre, puedes detenerte en Santa Ana, una magnífica playa de arena blanca bordeada de cocoteros y aguas cristalinas. El acceso al fondeadero puede ser complicado con mal tiempo, pero esta playa es un auténtico escenario de postal. Más al este, encontrarás la laguna de Saint-François, abierta al Atlántico, y la isla de La Desirade. En el cruce de Basse-Terre y Grande-Terre, cerca de Pointe-à-Pitre, podrás descubrir la isla de Gosier, un fondeadero fácil que ofrece un panorama impresionante del archipiélago. Tus vacaciones en catamarán por Guadalupe serán también una gran ocasión para descubrir las magníficas playas de la isla de María Galante, conocidas por su tranquilidad y belleza, como la playa de Feuillère, l'Anse de Mays o l’Anse Canot.
Catamarán fondeado en Petite-Terre (foto de Adobe Stock)
El exotismo de Guadalupe: perfecta para todo tipo navegantes
Guadalupe es un destino de ensueño para todos aquellos que buscan exotismo e increíbles paisajes. Y como muchas islas de las Antillas Menores, Guadalupe alberga una rica biodiversidad. Con el alquiler de un velero en el Caribe, podrás explorar la Reserva Cousteau y las Islas Pigeon. Esta zona marina es una reserva natural protegida en la que se pueden observar varias especies de peces exóticos, así como tortugas que nadan por el magnífico fondo marino. Descubierta por el capitán Cousteau en 1959, esta reserva se ha convertido en un lugar de buceo de renombre internacional, lleno de corales, langostas y esponjas de colores.
Al otro lado del archipiélago, cerca de La Desirade, se encuentra la reserva natural de Petite Terre, un parque nacional que protege muchas especies de aves migratorias y alberga un gran número de iguanas y otros reptiles. Por otro lado, una navegación en catamarán por Guadalupe será el preferido de los aficionados al senderismo y la naturaleza, ya que la isla de Guadalupe es un terreno montañoso que alberga una cálida vegetación tropical. Encontrarás las mejores rutas de senderismo en Basse-Terre, donde se encuentra el famoso volcán de la Soufrière. Una experiencia inolvidable en el corazón de la naturaleza caribeña.
Vista sobre la Gueule Grand Gouffre: una maravilla para los ojos (foto Adobe Stock)
2. Martinica, la isla de las flores y los mil colores
En el corazón del archipiélago caribeño de las Islas de Barlovento de las Antillas Menores, Martinica encarna la cultura de los territorios franceses de ultramar con brío y elegancia. Permítete un idílico descanso en este colorido paraíso y sal en busca de las especias, el ron y los dulces locales con el alquiler de barcos en Martinica. Con salida desde Fort-de-France o Le Marin, descubrirás los fondeaderos tropicales y las playas de postal mientras navegas. Todo lo que tienes que hacer es preparar tus maletas y evadirte del mundo durante unas semanas.
Una cultura criolla llena de sabores e historia
La isla te sorprenderá con la fascinante historia que tiene que contar. Rica en lugares arquitectónicos, museos y monumentos que datan del pasado colonial de la isla, muchos viajeros se pierden en la poderosa naturaleza de esta isla del tesoro. Con sus cascadas, su fauna y unas 3.000 especies de plantas tropicales, la selva de Balata es una visita obligada en Martinica. Su jardín botánico es una verdadera joya multicolor para los amantes de la naturaleza, con su profusión de flores y colores vibrantes.
En Sainte-Anne, la ciudad más meridional de la isla, podrás perderte en el casco antiguo y luego en las callejuelas del mercado de especias para encontrar recuerdos hechos a mano o productos locales frescos con sabores picantes y dulces. La calidez cultural y la contagiosa generosidad de los antillanos no harán que te arrepientas de haber escogido el Caribe como destino de vacaciones. Tómate el tiempo de visitar una destilería y degustar el ron local con el telón de fondo de la caña de azúcar de la que los antillanos están tan orgullosos.
Paisaje típico de Martinica con la montaña Pelée al fondo (foto de Adobe Stock)
Los puntos clave para visitar en Martinica
De vuelta a bordo de tu catamarán, alternarás entre fondeaderos únicos, playas de arena blanca en el sur y playas de arena negra en el norte. La playa de Salines es la más famosa de Martinica. Arena suave, cocoteros, agua turquesa: todos los elementos de una playa de ensueño están presentes. Si lo único que necesitas es un poco de paz y tranquilidad y quieres sentirte como un solitario Robinson Crusoe, Cap Macré es el lugar ideal para tí. Esta playa escondida en la costa atlántica te permitirá conocer el sublime arrecife de coral. En este archipiélago caribeño encontrarás los mejores lugares para bucear en Martinica y nadar entre bandadas de peces. Si prefieres el surf, el pueblo pesquero de Tartane, en la península de Caravelle, te hará feliz.
No puedes irte de Martinica sin descubrir la exuberante vegetación de Saint-Pierre, un fondeadero al pie del monte Pelée. Con 1.397 metros de altura, muchos excursionistas aceptan el reto de escalar este volcán por sus distintas vertientes hacia la cima, con la recompensa de un panorama excepcional sobre el Atlántico y las islas vecinas. Después de un viaje así en Martinica, permítete contemplar el sol desde tu catamarán en la bahía del remanso de paz martiniqués: Grande Anse.
La roca Diamant en la costa de Martinica (foto Adobe Stock)
3. Las Granadinas, 32 islas de aguas cristalinas
Los paisajes de postal y el sol son el secreto de las islas Granadinas para pasar unas vacaciones inolvidables en el mar Caribe. Situado en el sur de las Antillas, el archipiélago de las Granadinas se extiende por 32 islas e islotes entre San Vicente y Granada. Un centenar de millas por los que navegar tranquilamente para descubrir playas aisladas, cocoteros y encantadoras aguas turquesas. Esta parte del Caribe, que aún no ha sido tocada por el turismo de masas, atrae a un público de alto nivel. Contempla los arrecifes de coral y los bancos de arena, y déjate llevar por los vientos alisios hasta las Granadinas, una tranquila zona Caribeña.
Las Granadinas del Norte con San Vicente y Bequia
Tu navegación por las Granadinas puede comenzar con un alquiler de barcos en Martinica o Sant Vicent y visitar esta isla principal que se hizo famosa por ser el lugar de rodaje de la saga Piratas del Caribe con Johnny Depp. No dejes de hacer una excursión a su exuberante naturaleza tropical, o visita el colorido ambiente de Kingston, su capital. En los fondeaderos de la bahía de Cumberland y la bahía de Wallilabou podrás disfrutar de un buen baño. A continuación, comienza tu navegación hacia el sur para descubrir la isla de Bequia. El puerto deportivo de Port Elizabeth te ofrece una bahía protegida para descansar. Aprovecha para pasear por el mercado local y degustar especialidades criollas como la cocina a base de langosta, o los "rotis" rellenos de pescado o carne, sin olvidar el tradicional ron.
Vista de la bahía de la Soufrière en la isla de San Vincente (foto de Lionel Rossi)
Moustique, la versión caribeña del lujo
Navegando cerca de Bequia, descubrirás la pequeña isla de Balliceaux o, más al sur, la isla de Moustique, un auténtico paraíso de lujo. Como muchas islas del Caribe, Moustique está cubierta de vegetación tropical y bordeada de hermosas playas de postal. La única diferencia es que se trata de una isla privada, donde residen personas adineradas y a menudo famosas. Desde principios de los años 60, el número de villas de lujo para multimillonarios ha aumentado. Este remanso de paz puede ser una parada muy agradable durante el alquiler de barcos en el Caribe. Moustique ofrece un fondeadero protegido, de fácil acceso y bien equipado para tu alquiler de barcos en las Granadinas.
Vista aéra de la pequeña isla de Sandy Island (foto de Adobe Stock)
Descubre el paraíso de las Granadinas
A medida que se avanza por el archipiélago de las Granadinas, se navega de islote en islote a través de playas de arena fina y naturaleza tropical intacta. La bahía de Mayreau es un paraíso para los kitesurfistas y windsurfistas. La isla de Canouan ofrece un fondeadero bien protegido, muy útil en caso de mal tiempo. Más al sur, atravesarás la joya central de las Granadinas: los Cayos de Tobago. Este grupo de islas es un fondeadero paradisíaco que te dejará sin palabras. La tranquilidad está a la orden del día en este mágico lugar, propicio para la relajación y la admiración. Por último, Union Island también aportará su cuota de naturaleza impresionante a tu alquiler de yates en el Caribe. Dirígete a la bahía de Chatham para contemplar el fondo marino. Si eres una persona más aventurera déjate tentar por una excursión deportiva en la selva.
Vista aérea sobre la isla de Mayreau (foto Adobe Stock)